miércoles, marzo 07, 2007

UNA SEMANA DESPUÉS

Como bético expreso mi asco ante hechos como los ocurridos el pasado 28 de febrero en Heliópolis. Ante eso y ante el esperpento reiterado y los sainetes de baja estofa provocados por personajes disparatados, encabezados por ese ególatra, que amenaza con marcharse para nunca irse del Betis. Hablemos de Ruiz de Lopera, ese hombre.


Absolutamente nada justifica lo vivido en ese partido, y nadie más que los descerebrados que lanzan objetos (todos) deberían pagar las culpas, ya que no sólo se puede actuar cuando el bestia tiene puntería. Pero en esta tesitura parece necesario castigar cerrando el estadio, aunque paguemos todos, injustamente sí, pero no son posibles las excusas, aunque existan agravios comparativos, para que no se actúe de esa forma. No se puede justificar más. Ya está bien de dar cobijo a cualquier inmundicia humana capaz de apedrear la ambulancia en la que iba a ser trasladado el entrenador del Sevilla, e incluso desear su muerte, a base de gritos, en esos momentos de tensión, o en cualquier otro momento, por si es necesario aclararlo. Vergüenza, porque ante eso, entiendo, no puede sentirse otra cosa.


Y mucha vergüenza siento porque hace años, muchos años, debería haber desaparecido un personaje como Ruiz de Lopera, hoy manijero en la sombra, el sitio donde mejor se mueve. Donmanuel, cómo gusta que le llamen, individuo de catadura moral altamente reprochable que lo dirige todo, absolutamente todo, con un nivel intelectual rastrero, y no porque no maneje el castellano con precisión o porque tuviera poco de qué hablar con Kierkegaard, sino porque su discurso incoherente e irracional ofende al intelecto del que lo escucha. Tan lleno de maldad como de falta de sutileza, tan grosero que sólo puede provocar vergüenza ajena y, lo más triste, vergüenza propia para los béticos, porque desde el principio ha logrado mezclarlo todo, él es el Betis, el Betis es él. Y es que, lastimosamente, todo es suyo.

Persona perversa en esencia, que ha llevado un estilo de dictador cortijero y populista, que ha anclado y lastrado al club al más puro "estilo Lopera", y que nadie lo confunda con "estilo Betis" como ha intentado venenosamente hacer Del Nido, otro personaje más de la opereta. Donmanuel ha impuesto una especie de teocracia empresarial, con decisiones tomadas después de consultar a El Gran Poder, como él mismo confiesa, creador de un modelo arcaico en lo deportivo y lo social, fabulador de verdades imposibles y sin clase alguna, porque la clase no se compra ni con billetes ni, tampoco, con pagarés a 90 días.

Quizá este episodio, que nunca debería haber ocurrido, abra los ojos de aquellos que aún le agradecen y veneran por haber "salvado" al Betis en 1992, algo que el personaje recuerda un día sí y otro también por si alguien no se ha dado por enterado. Para Lopera la historia centenaria del Betis sólo tiene 15 años. Antes de él, la nada. Después de él, tierra quemada (¿?).


Posiblemente tras el 28F pocas cosas valgan para olvidar la ignominia del busto y de todo lo sucedido antes y después, pero es necesario conseguir que este hombre de misa diaria se retire para siempre. Tal vez ése sea el paso prioritario y, posiblemente, único para recuperar a tiempo algo de lo sentimental que aún nos pueda quedar del Betis.


(Tenía que soltarlo)


6 comentarios:

Leon dijo...

Simpatizo más con el Sevilla que con el Betis, dicho sea de entrada. Y Del Nido me parece un tipo muy poco recomendable. Pero lo de Lopera me produce tristeza precisamente por lo que dices, ha conseguido confundir el club con él mismo, y da la impresión que el betis que tiene 100 años y miles de aficionados es el que tiene el estilo casposo y cutre de Lopera. Cuando no tiene por qué ser así. Es un señor que se ha aprovechado de la mala situación del club para conseguir fama (no buena, pero fama) y supongo que más dinero, porque los negocios del futbol son poco claros en general y en el caso de Lopera pues menos aún.
La culpa del botellazo es del que la tiró, y cafres hay en todos lados incluido Riazor (mi estadio) donde he visto cosas que me han avergonzado varias veces. Pero lo que no puede ser es que un impresentable como Lopera desde la dirección del club jalee y provoque esas situaciones.
El Betis no merece que un tipo así ensucie su nombre.
Valiente tu post.

Anónimo dijo...

Esas cosas son peligrosas decirlas en Sevilla. Bien dicho.

Anónimo dijo...

No estoy nada de acuerdo. Lopera ha hecho del Betis un equipo de primera y antes os estabais pudriendo en la segunda división. ¿Qué queréis?

Anónimo dijo...

"ha hecho del Betis"...
(no comment)


Por desgracia hay indeseables "überall", en todos los paises y en todas las ciudades... Tú mismo fuiste testigo el 4M, lejos de Heliópolis, ese horrible estadio (con permiso de A.G.C.).

PD: No me dejaste ver el final, con tanta prisa...

Anónimo dijo...

Hay clubes que nunca alcanzan la grandeza que merecen porque les toca ser regidos por personajes como este Ruiz de Lopera.
El bobo del comentario "ha hecho del Betis un equipo de primera, etcetera" debería entender que lo que los clubes son, se lo deben eclusivamente a la calidad de sus jugadores y al entusiasmo de sus hinchas. Los dirigentes, a veces gestionan bien lo bueno que hay, y otras veces parasitan la grandeza ocasional que les da el fútbol. Al Betis y a cualquiera le iría mejor sin esta última clase de dirigentes. Borrarlos del mapa cuando son los DUEÑOS de los equipos es bastante difícil. Pero un bonito abucheo y alguna agresión verbal al mandamás en público ayudan a que aterricen, a que se bajen de las alturas que impropiamente ocupan. Digo yo: manque pierda, o manque se enoje el Sr. Lopera, se debería acordar una "antiovación" para ese sujeto.

Anónimo dijo...

Al que habla de un bobo, hay que decirle que es más iluso que otra cosa. Yo soy bético confeso y, bien seguro, mucho más bobo que nadie que se acerque por los umbrales de esta web. Pero tengo claro que si nadie apuesta fuerte (o arrima el talón) a un equipo depauparado, seco deportivamente y con poco apoyo, no hay quien lo levante. ¿Casos? ¡Decenas! En España, en Inglaterra... los éxitos deportivos del Betis, amigos míos, están ahí. Pero están ahora. Lopera, con todo lo excéntrico, egocéntrico, homosexual y mafioso que sea, es más bético que las botas de Gordillo y se ha dejado mucho dinero por este club. No digo que merezca respeto, pero por lo menos merece ser criticado solamente por sus salidas de tono ante las cámaras, que por otra parte, le echarían salsa a la liga si no se pasase tanto. Si Lopera estuviera callado sería nuestro Abramovich, salvando las distancias... Musho Beti, desde Barcelona